26 septiembre 2009

Microcuento

Él era diferente a todos los hombres que alguna vez habían estado aquí. Su traje negro estaba limpio y su camisa blanca, planchada. Desde el momento en que abrió la puerta se comportó como todo un caballero. Ayudó a un hombre con bastón, a levantarse de su silla y al acercarse a la barra para pedir una cerveza dijo "por favor" y "gracias". Fue por ese motivo que me pareció inoportuno hacer mención de su espantoso olor. En su ropa se había impregnado el olor a cementerio. Ahora, él se encontraba en mi bar tomando una cerveza sin marca, la conexión era obvia.

06 septiembre 2009

La obra de teatro

Un reconocido escritor está en la sala escribiendo su última obra de teatro. Deja de escribir, mira su trabajo aún incompleto, se levanta y comienza a caminar de una lado a otro de la habitación.

Escritor: -El final, ¿Cuál es el final correcto? (dice en voz alta mientras observa las hojas que están arriba de su escritorio).
Alter Ego 1: -Eso tú lo sábes, no yo (responde el escritor con una voz que no es la propia).
Escritor: -Eso yo lo sé, vos no tenés que decírmelo.
Alter Ego 1: -No es a mí quien deberías preguntarle.
Escritor: - ¿Y vos qué pensás? (deja de caminar).
Alter Ego 2: -Usted sabe que las obras teatrales no son mi especialidad (responde el escritor con otro timbre de voz, diferente al anterior).
Escritor: -Pensá en la historia como un cuento ¿Vos cómo lo terminarías?
Alter Ego 2: -Yo no escribiría un final para esa obra.
Alter Ego 1: -¿Por qué? (preocupado)
Escritor: -Porque es basura (decepcionado).
Alter Ego 2: -Yo no lo hubiera dicho así. Pero no niego que es verdad.
Alter Ego 1: -Son demasiado pesimistas, yo creo que la obra puede ser un éxito (esperanzado).
Alter Ego 2: -Lo dudo.
Escritor: -Muy cierto (comienza a caminar nuevamente).
Alter Ego 1: ¿Realmente piensas eso?
Escritor: (pensativo) -Creo que desde el principio la obra estaba destinada al fracaso.
Alter Ego 2: -Al fin dice algo que tiene sentido.
Escritor: (sonríe maliciosamente) -Ustedes están en la ella, ¿Sabían?
Alter Ego1: -Por supuesto que sí, por eso creo que no puede fracasar.
Alter Ego 2: -Yo lo ignoraba... usted nunca me lo dijo (sorprendido).
Escritor: -Supongo que hay cosas que hasta vos ignorás.
Alter Ego 2: (enojado) -Cállese.
Alter Ego 1: -Creo que tengo una idea, ya sé cómo terminar la historia.
Escritor: -Querrás decir mi idea (dice poniendo gran énfasis en la palabra "mi")
Alter Ego 1: -Estoy seguro que la idea es mía, tú siempre intentas quedarte con el crédito de todo.
Alter Ego 2: (frustrado) -Deben compartir la idea, sea de quien sea.
Escritor: -Claro, vos no sabés de qué hablamos (sonríe)
Alter Ego 2: Explíqueme.
Escritor: (resopla, se dirige al escritorio y se sienta en la silla) -Te contaré mientras escribo.
Alter Ego 2: -Realmente dudo que pueda hacer ambas cosas al mismo tiempo (murmura).
Escritor: -Te escuché.
Alter Ego 2: -Eso no es cierto.
Alter Ego 1: -Incluso yo te escuché.
Alter Ego 2: -¿Puede callarse?
Alter Ego 1: -Creo que no.
Alter Ego 2: -¿Y usted no puede callarlo?
Escritor: -Dudo que pueda hacerlo, lo he intentado muchísimas veces (con tristeza).
Alter Ego 1: -Sigo aquí ¿Saben?
Alter Ego 2: -Sí, ese ha sido el problema desde el principio.

(Un momento de silencio, luego el escritor vuelve a hablar.)

Escritor: -¿Quieren saber el final que pensé?
Alter Ego 1: -Que pensamos (dice, poniendo gran énfasis en la sílaba "mos")
Alter Ego 2: -Diga, no nos deje con la intriga.
Alter Ego 1: -Lamento decirte que tú eres el único que está intrigado.
Escritor: (Permanece en silencio).
Alter Ego 2: -¡Explique de de una vez! (enfadado)
Escritor: -Paciencia, aún estoy pensando.
Alter Ego 2: -¿No dijo que ya sabía el final?
Alter Ego 1: Aún no sabemos como escribirlo.
Escritor: -¿Podrían dejarme por un momento? Quiero pensar sólo.
Alter Ego 1: -Lamento decir que no puedo abandonarte.
Alter Ego 2: -Lamento decirle que él no puede abandonarlo.
Escritor: -Aunque sea, guarden silencio.
Alter Ego 1: -¿Dónde quiere que lo guarde? (dice reiéndose) -No puedo ser tan gracioso.
Alter Ego 2: -Si fuese un poco gracioso ya sería un progreso.
Escritor: -¡Les pedí veinte veces que callen! (se levanta de la silla enojado).
Alter Ego 2: -Callarlo a él es un milagro.
Escritor: -¿Puede evitar contestar? No quiero oír a ninguno de los dos.
Alter Ego 2: -Perdóneme.
Escritor: -¡Shh!

(El escritor escribe rápidamente el final de su obra y comienza a hablar nuevamente.)

Escritor: -Espero que al leer el final de mi obra la gente tenga compasión por mí. No es fácil dar tal final a una obra, poniendo el máximo de uno. Pero cualquiera en la situación del personaje hubiera hecho lo mismo.
Alter Ego 2: -¡Espere! (preocupado).
Alter Ego 1: -¡No!
Escritor: -¿Ven? Ni en este momento pueden callarse, ya me harté. (abre el primer cajón del escritorio y saca un arma)
(silencio)
Escritor: -¿Ah, ahora si deciden callarse? ¿Debo llegar hasta este punto para controlarlos? (dijo, puso el cañón del arma contra su cabeza y disparó)



Final alternativo: (para que tenga sentido deben haber leído este otro cuento)

Alter Ego 2: -Usted puede callarnos cuando quiera, lo sabe, pero...
Escritor: -...perdería mi talento, lo sé. A ustedes les debo todo, aunque recién ahora comienzo a darme cuenta de su presencia, siempre estuvieron allí, ¿Verdad?
Alter Ego 1: -Sí, desde que comenzaste a escribir.
Alter Ego 2: -Piense de nosotros como sus ayudantes.
Escritor: -Pero yo veo lo que hacen, Inconsciente me advirtió, intentan controlarme. Pero no van a lograrlo. (con firmeza)
Alter Ego 2: -¿Está ciego, no lo ve? Es él quien lo controla a usted.
Escritor: -¿Es eso cierto?

(el escritor se queda callado, sus ojos se abren completamente y sus pupilas se dilatan)

Escritor: -Ya veo (dice, se dirige al escritorio y comienza a escribir el final alternativo de su obra, agrega a Inconsciente como personaje y deja la obra inconclusa).

04 septiembre 2009

¿Dondé reside la culpa?

Hoy a la mañana, en Buenos Aires, llovió. Y mientras yo iba a la escuela en colectivo estaba pensando que alguien debía estar sacando ventaja de todo eso. Entonces me vino a la mente la respuesta, ¿Qué corporación tiene tanto poder como para provocar una lluvia tan fuerte? ¿Recuerdan el incidente en la ciudad Raccoon? Bueno, la misma compañía que encubrió todos los hechos, debe ser culpable de esto también, Umbrella Corporation.
Es sólo un pensamiento.